El trauma destruye la capacidad de sentir placer y alegría re-experimentando el suceso pasado. Imagen: Angustia- Oswaldo Guayasamin El estrés post-traumático destruye las sensaciones positivas y provoca en el cuerpo una experiencia somática que impide recobrar el equilibrio existente anterior a lo sucedido. El cuerpo muestra cómo nos sentimos. Las experiencias emocionales de la vida crean una forma anatómica determinada en el cuerpo. A su vez, esta forma proporciona emociones, sentimientos y pensamientos. A partir de la misma comienza el camino de la expresión o la inhibición, creando interacciones con el mundo y estableciendo relaciones. El cuerpo arrastra el bagaje genético propio y la historia personal de cada uno. Recoge las agresiones, los conflictos, la desilusión y los esfuerzos. Cuando acontece un evento traumático, el cuerpo reacciona muy intensamente. El miedo envuelve a la persona, haciendo que experimente una serie de reaccione...
No hay sabiduría en el estancamiento definitivo de lo que aprendemos y conocemos. Salud, patología, luces y sombras en cada persona. Afectividad, conducta, sentido, y relación. “PSICOLOGÍA Y LETRAS” recoge pellizcos de una pequeña parte de nosotros mismos.