Ir al contenido principal

DE CUANDO ME COMPRÉ UNA CUCHARA...Y LLOVIÓ SOPA

Me pregunto si Nahla habrá cantado ya bajo la lluvia. Le deseo toda la suerte del mundo.

Tanta suerte que quién sabe…Es posible que algún día pueda desafiar el puente aéreo
Madrid – Chad y obsequiarle con un grato paraguas, previo aviso, claro está, de “mejor no abrir tal presente en el interior de la choza”. Sólo faltaba que la desgracia volviese ahora a su aldea por mi culpa. Bueno, por mi culpa no, más bien por el hecho de abrir el paraguas en un lugar techado.
La cosa está ahí. Y yo me pregunto…¿qué fuerza sobrehumana tiene ese paragüitas que junto con el tejado de la casa, va a provocar una serie de desdichas para mí y para todos los que estamos cerca?
Ni Hamlet con su “ser o no ser”…”¿Abro paraguas o no lo abro?”; esa es la cuestión.

El caso es que todo esto viene porque antiguamente los paraguas eran bastante rígidos y nada fáciles de abrir. De ahí que el que intentara abrirlo en casa acabara casi siempre golpeando a alguien o a algo.
La realidad está en que hasta los más racionales de nosotros, acabamos por darle cancha al tema de las supersticiones. Una superstición no es otra cosa que la asociación de algo con un supuesto resultado negativo. La superstición puede ser aprendida en el entorno cultural o por una determinada experiencia personal. Además de esto, se puede decir que existe un reforzamiento siempre y cuando no se dé ese “castigo” después de llevar a cabo la conducta supersticiosa. Esto es, si un día nos levantamos apoyándonos sobre el pie izquierdo y resulta que ese día nos sucede algo poco agradable, es posible que relacionemos un hecho con otro. Tendremos más cuidado de apoyar el pie derecho la mañana siguiente, y si al hacerlo da la casualidad que ese día es maravilloso, no será extraño que nos pasemos el resto de nuestros días levantándonos sobre el pie derecho.
Lo que está claro es que eso que llamamos “suerte” ocupa un lugar considerable en la vida de cada persona, exceptuando a aquellos que viven interpretando los hechos a través de la lógica. (“todo tiene un motivo, una causa, una razón de ser y suceder”).
En el extremo opuesto se encuentran los que consideran la suerte como algo independiente a nuestros deseos o acciones, por lo tanto, la buena o la mala suerte llegará a nosotros de manera impredecible sin que nada podamos a hacer al respecto.
Y por otro lado, están los que consideran que la suerte existe y nos afecta, pero que se puede actuar sobre ella para conseguir buenos o malos resultados.
“Crear buena suerte únicamente consiste en... ¡crear circunstancias! La buena suerte sólo depende de Ti”

Me quedo con la tercera opción.
Y sin ánimo de presumir, decir que… ¡PaRa SuErTe, La MíA!!! ( y eso que nací en Martes 13…) Porque…"podría no haber llovido. Podría haber llovido pollo al horno. Podrían haber caído piedras. Pero llovió sopa".


Y yo estaba ahí…Con la cuchara.

Comentarios

Entradas populares de este blog

COCO, una mirada amorosa a los que nos preceden.

Cuando somos leales a algo que no nos pertenece, cargamos con compromisos y deseos ajenos. Ver y cortar los patrones repetitivos nos ofrece libertad. COCO es una de esas pelis que te toca y te remueve. De las que te hacen reír y llorar al mismo tiempo y te mantienen en esa constante emoción de principio a fin. Y más allá de todo lo que aprendes sobre la cultura Mexicana, más allá del Día de Muertos, de los alebrijes, del cempazúchitl y de la genial banda sonora...encuentras en su mensaje una realidad que nos afecta a todos.  La deslealtad al clan es "imperdonable". A Miguel le apasiona la música, pero ¿cómo introducir la música en una familia que la rechaza por completo? En ocasiones, las familias cargan con creencias transmitidas cuyo origen reside en un suceso traumático o algo que afectó en gran medida a uno de sus miembros. En este caso, podemos saber que "Mamá Imelda"  la Tatarabuela de Miguel, sufrió un abandono por parte de su...

ASUNTOS INCONCLUSOS. Lo que reprimimos tiende a salir a flote

Imagen: pintura abstracta, Creese.    La intervención pasa por verbalizar la experiencia interna.   Lagrimas no brotadas, gargantas bloqueadas para no gritar, pelvis que no han podido desplazarse... Existen miles de situaciones en las que el ciclo de la experiencia desvía la conducta y anula funciones de una parte del cuerpo. Los asuntos inconclusos producen "indigestiones" en el organismo. Por lo general, estas situaciones inconclusas incluyen situaciones pasadas o conflictos internos no resueltos. El amor no expresado, la culpabilidad no resuelta, el resentimiento, la rabia o acciones del pasado no aceptadas, son algunas manifestaciones que ofrecen información sobre alguna ausencia de cierre ante una situación o hecho específico. Un proceso de equilibrio. Los sentimientos no expresados a personas significativas pueden implicar asuntos inconclusos a menudo relacionados con situaciones de intimidad y control. Pueden tener que ver con situaciones traumáticas d...

ELIMINAR SÍNTOMAS. Constelaciones Familiares. ¿Mito o realidad?

Según la  Psicoterapia Sistémica  de  Bert Hellinger , cada vínculo creado nunca desaparece y repercute en el momento presente. La sanación llega a través de la reestructuración consciente de la situación familiar. Honrar y perdonar al familiar, es el acto lo que elimina el síntoma Imagen: Otra familia, de Arturo Morin Una Constelación familiar es un método de la Terapia Familiar Sistémica mediante el cual se pretenden descubrir los hechos que provocan determinados síntomas en la persona, siendo estos causados por la situación presente o pasada del sistema familiar.  La psicoterapia Sistémica de Bert Hellinger nace como recopilación o síntesis de distintos aspectos recogidos de muchas psicoterapias contemporáneas tales como el psicoanálisis, Gestalt, Programación neuro-lingüística (PNL), análisis transaccional, psicogenealogía,  o terapia familiar entre otras. En una Constelación familiar, la persona que “constela” explica el motivo de su consu...