MENSAJES DESTRUCTIVOS. El éxito en la pareja pasa por escuchar y expresar sentimientos de forma adecuada
El sufrimiento podría evitarse muchas veces con una comunicación eficaz. Imagen:ba1969 |
Una comunicación ineficaz impide compartir momentos agradables, induce a conflictos y provoca separaciones.
Cuando una pareja acude a terapia, uno de los fallos más frecuentes encontrados en la relación se centra en la comunicación. Las discusiones destructivas hacen sufrir a los miembros de una pareja de una manera bastante evidente. También hieren y perjudican los silencios, las ausencias de información y en resumen, todas aquellas formas que engloben pautas erróneas de comunicación.
Al comunicarnos ofrecemos una amplia gama de sentimientos, ideas, emociones e interpretaciones. A través de ella, las parejas pueden reconocer la capacidad de aceptación, apoyo y confirmación de poder establecer una relación intima y exitosa. La pareja crea una visión conjunta de la realidad del mundo a través de una comunicación generadora de funciones, papeles y roles adoptados por cada miembro. Cuando la comunicación falla, el avance y bienestar conjunto se diluye entre ambos.
A menudo, muchas parejas no transmiten directa o claramente sus sentimientos y utilizan mensajes que fallan más en la forma que en el contenido. La comunicación efectiva se basa en lo que decimos y en cómo lo decimos. No tener habilidad para transmitir mensajes puede provocar que la pareja tropiece una y otra vez en aquello que desean evitar.
A modo de ejemplo, algunos aspectos que pueden impedir una comunicación eficaz son los siguientes:
- Ordenes: "Ven y recoge esto ahora mismo"
- Amenazas: "Si no limpias ahora yo tampoco lo haré"
- Moralizar: "Tu responsabilidad es cocinar sin tener que decírtelo"
- Imponer soluciones: "¿Por qué no lo haces cuando termines lo que estás haciendo?"
- Reprender: "Tendrás que aprender a arreglar las cosas si quieres ser un buen marido"
- Criticar: "Nunca lo haces bien"
- Pseudoaprobación: "Me parece ver que estas demasiado cansada para hacer lo que tenias que hacer esta noche".
- Tranquilizar: "Te sentirás mucho mejor cuando hagas eso"
- Ridiculizar: "Es que eres vago"
- Interpretar: "Estas haciendo esto para que me enfade"
- Interrogar: "¿Puedes darme una buena razón de porqué no has sido puntual?
- Retirarse: "No me apetece hablar contigo ahora, me voy."
Analizar el patrón de interacción
En un círculo de continua retroalimentación como es la comunicación en la pareja, observar los patrones y secuencias de interacción entre ambos miembros ayuda a eliminar síntomas y situaciones problemáticas que afectan negativamente. La comunicación entre la pareja está pautada por los patrones de interacción adquiridos por parte de cada uno. De hecho, existen estudios que afirman que el ambiente de comunicación en la infancia puede determinar el punto de vista de la realidad social.
Es en la infancia cuando se adquieren los patrones de comunicación al interactuar con amigos, padres, familiares y maestros. Al establecerse, el estilo se mantiene, definiendo así futuras interacciones personales, la propia personalidad y la manera de percibir, reaccionar o afrontar las situaciones vitales. Es bueno ser conscientes de esto.
Por su parte, la responsabilidad del terapeuta de pareja pasa por fomentar el aprendizaje de una buena comunicación verbal y no verbal. Las parejas deben aprender a mejorar sus habilidades para comunicar de una forma directa, congruente, empática y útil. Centrarse en los mensajes, su comunicación, contenido y estilo más que en el porqué y comprender que tanto el contenido como el sentimiento tienen que ser recibidos correctamente.
Hacer de la comunicación eficaz un hábito, sabiendo que la práctica repetida es siempre base de aprendizaje.
Comentarios